Sanando
la subpersonalidad adictiva
La
subpersonalidad adictiva siempre tiende a buscar algún elemento, sustancia,
circunstancia, creencia, afirmación o decreto interior, animal, persona a lo que
aferrarse de manera destructiva, desordenada y compulsivamente para aliviar la
angustia interior, la ansiedad, el nerviosismo surgido ante los obstáculos, los
cambios repentinos, los desafíos, los retos, y por el surgir de emociones
intensas respecto a vivencias concretas, sobre todo cuando son prolongadas,
durante meses e incluso años. La personalidad adictiva necesita y hará lo
posible por evadirse, esta es la clave, hará lo posible por huir del impacto cruel
de la realidad, tanto más intenso según la naturaleza y carácter de cada uno. Cada
temperamento afronta, experimenta, recibe y vive la realidad con matices muy
diferentes.
Evidentemente,
el camino más sano para trabajar con esta subpersonalidad sería proporcionarle
un campo creativo donde expresarse y donde hallar medios de manifestarse y
aliviar la presión y la tensión transformando sus sentimientos y emociones en
algo positivo. Pero hay momentos críticos en la vida en que esta
subpersonalidad tarda más en ser localizada y por lo tanto nos sumerge y nos
conduce por vías expresivas inadecuadas.
Hay momentos decisivos
en la vida en que esta subpersonalidad consigue tomar el control de nuestro
destino, nos colapsa, paraliza, obnubila, hemos de permanecer atentos porque aprovecha
para afianzarse mediante un deseo ideal interno de morir, como medio de escape,
proporcionando alivio, ante las situaciones que día tras día agotan la mente y el
sistema nervioso, bien porque producen hastío, bien porque hacen surgir miedos,
complejos, bien porque terminan provocando cansancio, sensación de impotencia y
frustración, y el ser va sumiéndose en una noche oscura donde prima la
confusión y la apatía y, lo que es peor, una inmovilización interna para saber
y poder actuar para salir de estos estados de dolor y sufrimiento en los que
apenas se consigue respirar, en los que se desearía gritar y desahogar el
tormento, la pena, la tristeza, el tormento. Si bien la personalidad ha tomado
conciencia de la adición al dolor y al sufrimiento e intenta controlar y
dominar esta inercia queda como recurso más sutil el aferrarse a la muerte como
liberación, ya que tras la muerte se presenta el paraíso perdido, el retorno a
la dulzura y la paz, al silencio, el retorno a la fuerza que nos crea, es poder
caer en un estado de alabanza pura donde ya todo es perfección y belleza.
Vamos a tratar a
esta personalidad y qué posibilidades de expresión constructivas tiene, para
ello apelamos en primer lugar a la inteligencia del Ser interior, para que vea el error del proceder de esta subpersonalidad
adictiva, puesto que está creando un mundo de fantasía para huir, y no de una
manera sana y creativa, además esto supone una pérdida de energía y por
consiguiente y, a la larga, de la salud. Es una personalidad que anula y nos
aniquila en nuestra libertad de elección y en nuestra capacidad como
co-creadores. Hemos de procurar alcanzar todos estos estados paradisíacos en el
aquí y ahora, no digo en un abrir y cerrar de ojos, no digo que sea fácil ni
rápido, no siempre, pero hemos de procurar que la voluntad se encamine hacia
este trabajo terapéutico que aportará un sentimiento renovado interior de
fortaleza y libertad.
Es importante
este trabajo porque vivir en la dualidad, entre un deseo de vida y de muerte,
sabiendo que hemos de amar la vida, puede provocar muchos desajustes en el sistema
nervioso y por consiguiente en el hormonal y en el inmunitario. Podemos ir
muriendo poco a poco, destruyendo nuestro cuerpo asediado por diferentes
enfermedades, y si ya hemos optado por romper la adicción al sufrimiento y al
dolor, entorpecerán y estancarán nuestra evolución debido a la atención que
habríamos de poner en los cuidados corporales y el malestar psico emocional.
Hemos de procurar
otorgarnos y servirnos de todo aquello que la naturaleza pone a nuestra
disposición para equilibrar el sistema nervioso, alimentación y complementos
naturales –oligoelementos, plantas, aceites esenciales, sales del doctor
Schussler, flores del doctor Bach, preparados homeopáticos, masajes relajantes,
etc- unidos a la meditación, a la oración, a la plegaria, a la terapia. El amor
potenciará todos estos ingredientes sanadores.
Garantizo que es
posible avanzar a través de la densa niebla, se irá disipando, y que aparecen
las ayudas adecuadas, sólo hemos de elegir y decir “sí al don de la vida”, “sí
a descubrir la belleza del planeta y la armonía del Universo”, “sí al aquí y al
ahora”. El resto, se nos da por añadidura, de verdad, realmente, en la
práctica, en la vida cotidiana. La condición primera, agradecer las ayudas que
sabemos que tenemos, sean o no en cada momento lo más adecuado a nuestros
anhelos, expectativas y deseos. También hemos de aprender a pedir, a tener
claro interiormente qué necesitamos y qué queremos, definir con claridad y
expresar evitando de esta manera la confusión. Y después hemos de entrar en
nuestro templo interior, espacio sagrado, y reconectar con nuestra fuerza y luz
propia, al menos con la voluntad, el resto, se nos da por añadidura, de verdad,
es la experiencia la que fundamenta esta afirmación, hemos de asentarnos en la
confianza y la fe.
Es posible
cambiar los decretos internos y cambiar la bioquímica que se produce en
consecuencia y que está produciendo cambios en nuestros estados de humor. Tal
vez lo más complejo sean casos agudos y crónicos de patologías físicas cerebrales,
y nunca se sabe con los adelantos actuales qué puede lograrse gracias a la
medicina cuántica y otras terapias con elementos y energías sutiles, por
ejemplo, hará falta tiempo y experimentación para compartir respecto a estos
resultados.
Tenemos muchas
herramientas a nuestro alcance. No dudes en consultar con un experto en
nutrición, un naturópata, un homeópata que podrán darte la dieta más adecuada y
los complementos más apropiados según tu organismo y estado de terreno en estos
momentos. Y, por supuesto, tienes a tu disposición todas las terapias
complementarias para ayudarte a cambiar la programación de tu mente para salir
de la prisión que a lo largo de los años hayas podido construirte con
pensamientos tóxicos y dominando las emociones sin ningún control. Siempre es
posible reeducarnos y cambiar hábitos para alcanzar un estado de vida de mayor calidad,
en nuestra vida ha de primar el optimismo, el pensamiento positivo, esto es
adquirir un estado habitual sano,
disfrutando así en plenitud de la belleza que nos rodea y desplegando todo
nuestro potencial. La
Astrología te ayudará a afianzarte en los dones que traes y
la misión para desarrollar así como en las metas a alcanzar con serenidad para
tu felicidad y la de los que te rodean, pero sobre todo es esencial un sentimiento
interno de entusiasmo vital apacible.
Datos astrológicos Noviembre 2012
Eclipse de Sol y
Luna Nueva a 21º de Escorpio.
Escorpio:
muerte y renacimiento, renovación, eliminación de lo que impide avanzar y alcanzar
un estado óptimo de bienestar.
Astrológicamente
habrá afectado a los nativos en cuyas cartas astrales Neptuno se encontrara en
estos grados, conexiones en las cartas con él del Sol, Luna, Mercurio, Venus y
Marte. Sobre todo si a su vez estuvieran conectados con Urano-Acuario o Plutón.